jueves, 29 de julio de 2021

Puedo vivir sin dinero, no sin un destino

Antes de volver a salir de la ciudad y en calma quería escribir algo.

Hubo un tiempo en el que cuanto más mayor me hacia más crecía la desesperanza respecto a mi mismo y en todo lo que veía a mi alrededor. Hasta que comprendí que la única forma de salir de esos pensamientos pesimistas y alarmantes pasaba por comprenderme a mi mismo, cambiar actitudes y entonces, hace un tiempo, tuve la suerte de rodearme de personas que me enseñaron a escuchar al alma. Creo que es cuando entendí que la felicidad no era ese estado que me habían vendido. Lo se por qué empecé a sentir de forma diferente. 

Desde ese momento sueño con ver al mundo cambiar y disfruto no siendo como el resto. El conocerme mejor y permitirme ser diferente, por no estar de acuerdo con aquello que viene establecido por esta sociedad, me libero de prejuicios, estándares, ataduras, miedos. No hubo nada mejor en mi vida desde entonces que creer y tener metas que fuesen mas allá de estabilidad, tranquilidad y comodidad, tratar de conseguirlo aun sabiendo que son imposibles y no conformarme ni caer en rutina de rebaño que no ofrecen. Solo quería crear y crecer. Ambas se retroalimentaban y me hacían ser mejor persona y más feliz.

El siguiente paso fue crear una verdad propia (total, ¿por qué tenía que ser cierta la que han creado otros y me han dicho siempre? hasta donde se tiene la misma validez que la mía) y creí en ella, crecí en el camino y caí en malas decisiones. No todo iba a ser perfecto.

Sigo pensando que merece la pena luchar por un lugar mejor, equivocándome en el proceso mil veces. Uno de mis grandes errores es creerme con la responsabilidad de tratar de abrir los ojos a gente..lo cual me genera infelicidad e inseguridad y me hace dejar de creer en mi, desconfiar y transmitir esa desconfianza. 

Aprendí que la vida dura un momento, pero que si lo vives bien es suficiente. Llegue hasta aquí y capturé momentos bellos, en estático y movimiento, transmití con mi voz emociones e historias, aparté lo que solo vino a destruir y a doler, vencí al odio y el rencor y me di cuenta de que si me iba bien de quien me iba a querer vengar. Y ahora sonrío antes de dormir. Y eso no tiene precio en ningún tipo de moneda, ni criptomoneda. 


Soy un poeta de burdel, un bohemio y un borracho,
tú eres la princesa de los sueños de este gacho,
escribir es mi negocio y el bar es mi despacho
A veces lo hago llego al fondo de tu pecho me quedo tan ancho.
¡Préndelo!
Complícame la vida para darle color,
Solo pasaba por aquí en realidad voy hacia el infinito,
A mí échame polvos no miradas ¿te lo explico?
Te invito a ver porno en el espejo de mi cuarto,
Si te aburres nos hacemos los muertos,
Si saltan chispas acabará en incendio,
Y a ti en una mirada que no olvidas ni bebiendo.
¿Haces lo que debes o haces lo que te divierte?
¿Estás libre de pecado?, no sabes lo que te pierdes,
Si caminas por el filo cuida el paso,
Piensa donde quieres caer, por si acaso.

No hay comentarios:

Publicar un comentario