sábado, 2 de octubre de 2021

Ya lo decía The Cure: Friday, I´m in love

El Jueves por la noche terminé contestando de una manera bastante fea a alguien que me escribió. No quería que nadie me perturbase mi vida ahora, sobre todo gente de una época gris. Me ha costando tanto alcanzar esta calma y esta felicidad que no quería dar pasos atrás y menos cuando se acercaba otro gran Viernes, marcado en el calendario. Es cierto que no debí comportarme así, como hacia hace un tiempo, pero me daba tremenda pereza empezar a pensar en  esas cosas que están tan lejos, y reaccioné de la manera más brusca que pude para intentar alejarlas. No estuvo bien.

Y llegó el viernes. Me desperté y comencé a leer Feria, por fin, tumbado en la cama y pegándome el sol en la nuca creando una atmosfera agradable. Me leí los 3 primeros capítulos y fue suficiente para saber que es uno de los mejores libros que he leído en mucho tiempo. Por como está escrito y por sus temas que aborda, que no son pocos y son muy actuales. Puede parecer una opinión subjetiva por conocer a la autora, pero no, es que de verdad que está jodidamente bien escrito. Ojala escribir así. Con esa naturalidad. Lees y todo lo estás viendo. Lo admiro tanto. Por mucho que me guste escribir y haya leído mil manuales de escritura el escribir bien me sigue pareciendo un reto al alcance de pocos y ella lo tiene. De sobra. Reconozco que me hizo mucha gracia que a las pocas páginas ya apareciese mencionado mi mejor amigo, pero como digo, creo que cualquier persona que lo lea, sin conocer a los personajes verá en el libro una magia y un valor tremendo. Es un libro que te hace pensar. Eso vale oro.


Cuando dejé el libro y cogí el móvil vi el mensaje de Alain, diciendo que ya estaba de camino a Madrid y sentí que era inminente, que la banda se reunía de nuevo. Que muy pronto iban a volver las noches de jaleo. Y que había que estar preparado.  Había que buscarse un buen atuendo, aposté por ir monocromático. Al fin y al cabo era viernes, viernes de esos sin mochila y de dar clase de cine. 


Cuando me quise dar cuenta era prácticamente la hora de salir de casa. Comí a toda pastilla y me pinté las uñas en apenas unos segundos. Quedando un resultado bastante mediocre. En ese momento empecé a pensar en que debía escribir a dos personas ese día. Que no debía dejarlo correr, que estas cosas cuanto más esperas peor.

Cuando llegué a clase vi la ilusión en sus ojos, era día de rodaje. Lo tenían todo preparado. Se les veía con ganas. Llevábamos dos semanas de curso y tras varias prácticas de cámara se enfrentaban a grabar su primera secuencia completa. Entre al aula y todos me miraban con los ojos brillantes y me contaban como lo tenían planeado super animados. No es de esas clases que te tocan a veces que son unos setas o unos muertos en vida. Me recordaban un poco a parte de la primera promoción. Gente que tiene claro que se quieren dedicar a esto y que van a aprovechar todo al máximo.


 Aproveché cuando empezaron a grabar para enviar uno de esos dos mensajes que tenía que enviar si o si. Fue a la persona que el Jueves hablé tan mal. Le pedí perdón por las formas. No tenía ningún sentido haber reaccionado así. Le traté de explicar lo bien que ahora me va todo, y que no quería andar dando vueltas al pasado, pero que lo hice de una manera poco efectiva y que fue un impulso. Con la conciencia más tranquila por darme cuenta de que puedo gestionar mucho mejor que antes las situaciones y mis emociones me acerqué a ver como iban los chavales.




Estaban felices. Me dijeron que en la mañana, donde conocen a ortos alumnos de primero no están haciendo cosas tan guays ni aprendiendo tanto, y me volví a sentir que estaba en el lugar correcto haciendo las cosas bien y que el turno de tarde era un gran acierto. Al fin y al cabo estudié la carrera y el máster de tarde, y he tenido más trabajos de tarde que de mañana a lo largo de mi vida, y no me he muerto. El perfil de los alumnos suele ser mejor de tarde, eso ya me lo habían avisado otros profesores, y tenían razón. Cuando me acerqué a ver como iba el otro grupo y vi el dibujo pensé "esta gente tiene muchas ganas de hacer las cosas bien". Habían recreado el dibujo del bloc, y estaba bastante logrado.


Les veía recreando los diálogos de "Olvídate de Mi" y no podía dejar de pensar la suerte que teníamos todos. Ellos y yo. La tarde pasó volando. Más que ninguna otra. Y cuando bajé a la calle todo seguía igual. Tal y como lo habíamos dejado unos meses atrás. Ese lugar que durante dos años había sido nuestra segunda casa. Como en las buenas sitcoms siempre los personajes tienen un bar, su mesa, su sitio cada uno. Y como las rutinas no cambian también nos terminaron invitando a la del jefe. Las cervezas gratis siempre está más ricas. Gracias al fin de la pandemia lo bueno es que de ese bar ya no nos retiramos, si no que salimos de parranda. A comernos la noche. A quemar Madriz. Y fue ahí, al final de la noche, cuando me di cuenta de que había estado tan ocupado y pasándola tan bien que el otro mensaje que quería escribir se me había pasado por completo. Pero esa es otra parte de la historia y lo que ocurrió después es mejor dejarlo para otro día.

miércoles, 29 de septiembre de 2021

Se nos da fatal necesitarnos tanto

Hacía mucho que no tenía un sueño tan raro, que me dejase tan mal sabor de boca al despertar.

Desde que comenzó el verano estoy consiguiendo dormir 8 horas diarias, algo que creo que no me pasaba desde que era niño y, en general, los sueños no me molestan tanto. Ha habido excepciones, como el de esta noche.

Soñé un batiburrillo de cosas extrañas, de personas de contextos diferentes mezcladas en una misma historia. Y como suele ocurrir en la mayoría de mis sueños el rol que cumplo no se parece en nada al de mi vida en el mundo real. Suele ser como si en el sueño tuviese otra vida. Supongo que debe ser porque ahora estoy viendo Sex Education, pero todos cumplíamos ese rol de adolescentes de instituto. Como si fuésemos compañeros de una misma clase.

No hace ni dos horas que me he despertado y muchas cosas se están disipando como suele ocurrir, pero la parte dura sigue ahí. 

Era cuando me decían que a la Chica la tenían que operar y que estaba enferma. Se me hacía un agujero en el pecho. Se suponía que ella llevaba días sin venir a clase, pero nadie sabíamos por qué. En ese momento entraba en la sala en la que estábamos y estaba hecha una mierda. Tosía fuertemente, estaba con la cara chupadísima y con un tono de piel como desaturado, tirando a gris. 

Como en la vida real en el sueño tampoco nos hablábamos, supongo que esa era la única similitud, la base real, lo que se había extraído del mundo real para crear ese universo. Pero necesitaba un contexto, un contexto tan terrible y diferente para hacer lo que hice.

Me acerqué, aunque también en el sueño me costaba un mundo. Ella no me miraba a la cara porque tampoco parecía dispuesta a hablarme. Lo único que hice fue ponerme enfrente y abrazarla muy fuerte. No porque pensase que se iba a morir o algo así, no sentí que fuese una despedida. Sentí que el abrazo era la forma de decir, "lo esta pasando mal y no estoy, soy imbécil". Ella en ese momento me dijo "Te echo de menos". Y continuó el abrazo, muchos segundos. Y luego el sueño parece que iba de otras cosas que tampoco recuerdo mucho, pero eran menos relevantes.

Se que esa escena terminaba ahí. 

Al levantarme me quedé pensando en ello. En el abrazo. Su frase de después no me parece tan relevante. Al final, mi cerebro le ha dicho a ese personaje que diga eso porque es lo que me gustaría oír, pero eso no tiene valor ninguno porque puede que ni sea cierta. Me parece que tiene mucho más valor lo que intentaba decir mi subconsciente con el abrazo. 

A esa conclusión he llegado. No era miedo a la muerte y pensar que igual no la iba a ver más. No lo sentí así. Era más un "no estoy para las cosas que tengo que estar. No estoy para lo importante. No estoy". Dolió un poquito. No me gusta soñar estas cosas porque no dejan de ser llamadas de mi subconsciente diciéndome. "Quizá la jodiste". Joderla la jodemos todos en algún momento. Lo malo es joderla con alguien así de importante. 

Ahora quiero que arrugues la frente,
Que te diviertas hasta bostezar,
Que me corrijas si digo que siempre
Que necesites que esté voy a estar.

Tengo una fobia brutal al presente
Y aunque presumo de ella
Sólo recuerdo haber sido valiente
Desde la barrera

Se nos da fatal necesitarnos tanto.
Se nos da tan mal

A veces quiero que cojas mi mano
Y me preguntes si voy a saltar,
Ya no me aterra mirar hacia abajo
Estoy cansado de hacerme esperar.

Llevo la rabia precisa y constante
Y sobrevivo de ella.
Cuando salí con los pies por delante
No había otra manera.

Se nos da tan mal

martes, 28 de septiembre de 2021

Y ahora hacemos tantas cosas que antes, por temor irracional, dejamos de lado...

3 años después he conseguido dar las materias que quería. Igual eso ha influido a que esté siendo mejor profesor este que en el resto de años. No concibo como podía haber profesores de cine los años anteriores que no se aburrían de dar esas cases sin grabar y montar lo grabado, día tras día. Será que yo lo echaba demasiado de menos desde que dejé en mi vida la parte de la realización de audiovisuales para ser profesor de ello. Apenas llevamos dos semanas de curso y ya hemos cogido la cámara 4 veces. Esto me ha permito enseñar el manejo de la misma manera prácticamente individual y tener la certeza de, por primera vez en 3 años, que puedo ser consciente del aprendizaje real que tiene cada uno de los alumnos.

Esto se suma a los divertidas que son las clases, donde practican, crean, aciertan y fallan, pero empiezan a comprender que usar una cámara no solo es dar botón de grabar, usar bien un trípode no solo es abrirlo y poner la cámara encima o escribir un guion no solo es contar una historia y todavía nos quedan muchas más cosas como la iluminación.

Sin duda este curso está siendo diferente y el feedback de los alumnos también. Ya no tengo esa presión y esa duda de si estoy explicando las cosas bien, porque ahora se bien de lo que hablo, porque me tiré una década grabando y editando videos, escribiendo guiones, iluminando, haciendo fotografías...Otras veces he dudado mucho de si se me daba bien dar clase, si realmente valía para ello, si podía aportar algo a personas que querían aprender, si me había equivocado al escoger ese camino. Este año en tan solo dos semanas me he dado cuenta de que de esto sí. Que no solo sirvo para enseñar, si no para motivar, guiar y orientar en su camino a aquella persona que quiere ganarse la vida de esto. Que disfruta y que le gusta este maravilloso mundo del audiovisual.

Desde este verano me he permitido volver a grabar, editar y hacer fotos en proyectos que han ido surgiendo. Después de tanto tiempo pensé que estaría desfasado, que no tendría ritmo o que habría perdido parte de las habilidades que me costó tanto tiempo tener. No ha sido así. Eso me ha permitido empezar a compatibilizar las dos facetas, al de enseñar pero seguir creando. Con la suerte de encima tener una red de personas de las que tirar para poder hacer cosas como son algunos alumnos. 

Es cierto que el primer año como profesor di con una promoción excepcional en muchos sentidos, aparte de por ser enormes personas, por tener talento, interés, iniciativa, creatividad. No todos los años son así, pero el primero lo fue y este año, aparte de volver a dar con un grupo con enormes ganas de aprender, tengo la sensación de puedo aportarles mucho más.

Muchas veces mi cabeza se pregunta que hacen muchos alumnos estudiando esto si parece que no les interesa en exceso y se quejan de estudiar, currar o aprender. Se quejan de hacer trabajos, de exámenes o de plazos de entrega de contenidos que les deberían motivar, incluso pasando de hacerlos en vez de ver que es una oportunidad para aprender más o asentar lo aprendido. Yo no era un empollón cuando estudiaba esto, ni mucho menos, pero a mi me flipaba ir a clase de realización cuando era estudiante y grabar, hacer trabajos y también sacar buenas notas porque me demostraba que estaba haciendo las cosas bien. A veces incluso esas quejas o esa indiferencia por parte de alumnos me afecta o me molesta porque para mi esto es mi vida y no puedo entender como no se disfruta, especialmente si es una elección libre el escoger estudiar esto. 

Este mundo es mi mayor pasión desde que era un niño, cuando ya recreaba películas inventadas con mis juguetes o escribía historias fantásticas desde los 7 años. Es cierto que esa visión ha evolucionado, como es natural, y ya no tengo las mismas fantasías que tenía de niño, pero esa etapa me permitió enamorarme de todo esto y todavía hoy sigo con la misma pasión. Tengo la suerte, en ese sentido, de tener claro algo que siempre, por mucho tiempo que pase, me seguirá ilusionando como cuando era niño. Por eso me desmotiva ver a profesores que se agotan o sudan de hacer su trabajo bien o alumnos que pasan de todo y se titulan porque hay algo que hacer para no ser un cero en este sistema. Yo cada año me encuentro mejor sabiendo que se más, que hago más cosas, que ahora ayudo a aprender sobre cine y montaje, que cada vez lo hago mejor y que pasen los años que pasen se que jamás me cansaré de esto. Y eso vale mucho.

Adjunto fotito del verano a la gran Casero. 



Tengo más de lo que quise ser
Que lo que he conseguido
Ya no está tan mal visto restar
El valor añadido

Quiero que hasta la próxima vez
Que tomemos partidos
No haya más soluciones
Que ganas de amar el conflicto

Ten un plan
Luego haz caso a nadie
Flota al margen
Todo lo que importa
Está en el aire

Aunque tenga más fobias de peso
Que buenos motivos
No hay dolor
Nunca pegan tan fuerte
Ni es tan destructivo

Llegan tarde
Todo lo que importa
Está en el aire

domingo, 26 de septiembre de 2021

Todos los raros fuimos al concierto

Todos los raros fuimos al concierto.

Así comenzaba aquella canción de la banda que nos marcó años atras cientos de noches en viajes de carretera, festivales, conciertos, en la cama o tirados en el sofá. La maravillosa época en la que íbamos imantados a ver a nuestras bandas, cuando todo nos iba bien o incluso cuando todo nos iba mal.

El primer regalo fue aquel concierto de Lori Meyers en La Riviera. Recuerdo que tuve que pedirle un préstamo de dinero a mi hermana por aquel entonces. Era en Diciembre, pero yo la compré meses antes. Antes incluso de que las cosas nos fueran bien. De hecho, las compré cuando todavía estaba con otra persona, pero había marcada una fecha de caducidad tan grande que no me importó comprarla y esperar. El tiempo me dió la razón. Pocos meses después ella me llevó por mi cumpleaños a ver Love Of Lesbian. El primero de tantas veces que les vimos. En tantos escenarios. Y poco después, ya planeando nuestro interrail, le regalé la entrada al Arenal Sound. Donde comenzó nuestra historia un verano antes. Y así tantas veces, el lenguaje de conciertos que tanto nos encantaba. Siempre había canciones con las que identificarnos. Incluso cuando todo estaba roto, mucho después, volvimos a La Riviera. A la que fue nuestra primera sala para ver a Supersubmarina. Nuestro último concierto. También me invitó ella, y también la compró en Octubre, cuando pensaba que todavía existía una solución. Esta vez el tiempo no nos dio la razón.

Estos meses he podido volver a disfrutar de la música en directo, después de un año invisible, donde nos cancelaron tantos festivales y conciertos. Una parte de mi sentía que faltaba algo y que desde primavera he recuperado. Todo comenzó en Abril cuando mi hermana me regaló una entrada para McEnroe, curiosamente la primera banda que vi con la Niña Imantada en el primer Arenal Sound, hace 8 años ya. Mi hermana había comprado dos entradas unos meses atrás para ir con una persona que ya no estaba en su vida. No creo que en Enero se lo viese venir. Imagino que durante todo el concierto mi hermana se acordó y pensó en esa persona.

Debe ser cosa de familia. Este año yo también compré en Marzo dos entradas para un concierto el próximo Enero. Con la misma intención. Ir con alguien. Yo debo ser aún más imbécil por pensar que en 10 meses esa persona querría seguir en mi vida. Resultaba un tanto fantasioso, mirándolo desde el presente. En aquel momento no me lo parecía, pero a día de hoy resulta bastante obvio que la otra persona no tiene la más mínima intención de estar.

Anoche fue el concierto de Viva Suecia. Salté y me dejé la garganta con cada frase que he hecho mía. Hoy al levantarme algo resacoso he recordado el concierto que llegará en Enero. Me llevaría a mi hermana, por devolverle el regalo de McEnroe, pero no le gusta el artista. 

El concierto de anoche ha sido el que más he disfrutado desde que ha vuelto la música en vivo. Estaba lleno de frases que he tenido en bucle durante los últimos años y que ayer pude gritar al aire. Tantas letras que me cuesta elegir con cual quedarme para este post. Quizá la única canción lenta que tienen es la que hoy más me apetecía escuchar. 

Sal a vencer, toma un camino
Horas después, te guardan el sitio
Tus propios abismos
Van a llegar los días amables
Deben estar echándole un cable
A los mismos de siempre

Se abre el telón
Nadie se ríe
Te dejo ser yo
Total, ¿de qué sirve ser el hombre invisible?

Pasa otra vez
Te tiemblan las manos
Vas a correr y sigues parado
Fumas demasiado

Si nunca llegara
No hay nada de malo
Se cose, se canta y se aguantan los palos
Y entiendes entonces que acaba en calvario
Lo poco que puedas llevarte a los labios

Querías saber que se siente a este lado
Pues cierras los ojos y ves demasiado
Te mueres por dar aunque nadie te pida
A todos nos pasa una vez en la vida

Y el pecho es de acero
A prueba de balas
Las almas que brillan son almas muy claras
Y aceptas con gusto y termina el problema
Que todo sea esto y en vez de una cena
No vuelva a perderte jamás

sábado, 25 de septiembre de 2021

Divertimento o distracción

El extraño placer de ir a trabajar los viernes sin mochila porque sé que directamente cuando salga del curro me voy de fiesta. Me recuerda a la etapa universitaria, cuando también tenía el turno de tarde, donde hacíamos lo mismo. Así eran aquellos viernes. La única razón para ir al campus era porque según salíamos del aula empezábamos a beber en el césped de la uni y de allí al centro, ya un poco croquetas. Ahora me salto las zonas intermedias y del curro al centro y del centro a la camita, ya con los pijamas largos que tanto me gustan.

Así fue anoche. En cuanto salí de trabajar pillé metro dirección Arguelles y allí nos plantamos. Entré en un bar al que llevaba sin ir desde 2014. No lo recordaba, pero en cuanto traspasé la puerta y vi la decoración, los dardos, el futbolín, la barra...me di cuenta que ya había estado allí antes y que en aquel preciso instante fui feliz.

La noche pintaba ya dura con ofertas de 3 minis de cerveza por 2. Había que adaptarse o morir. Y allí conocí a Irene, justo entre el futbolín y los dardos. Hablamos bastante. Muchas cosas, no voy a mentir, no las recuerdo. Son flashes de palabras, pero la conversación que mejor recuerdo es la que da título a este entrada.

¿Qué razones tendrías para liarte con alguien que no conoces, es decir, que no sientes emociones porque le acabas de conocer? Yo expuse en ese momento sin haberlo pensado previamente lo que me vino a la mente. Distracción o divertimento. Después lo que hice fue explicarme improvisando sobre la marcha, pero tratando de dar algo de coherencia al discurso. Fue algo así:

Divertimento: cuando te encuentras en un buen momento, quieres pasártelo bien y no le das mucha importancia al tema en sí. Nunca he sido así. De hecho, desde que empecé a salir de fiesta, hace ya millones de años, he evitado ese concepto de ligar de noche. A pesar de que la mayoría de la gente era lo que perseguía cada vez que entrabamos en un bar, discoteca, fiestas...

Distracción: no estas en un buen momento, quieres dejar de pensar en aquello que te pesa, que aligere la situación, aunque es momentáneo. En este equipo he estado algunas veces más. Tampoco muchas porque sigo sin ser partidario de los líos de fiesta, como dije anteriormente. No lo era de adolescente, pues como que ahora me parece un sin sentido aun mayor.

Después de contarle lo que para mi significaban esos dos conceptos (sin la parte de con cual me identificaba más, creo que contar a Irene eso no aportaba nada), me di cuenta que estos meses he practicado demasiado la distracción y reconozco que me dieron momentos, noches, situaciones y viajes increíbles. Más por la iniciativa e intención de la otra parte que por la mía. Por eso hubo que abandonar.

Ayer no quería distraerme. No por Irene. Ella daba razones para que la noche pudiese estar bien. Pero creo que tengo que enfrentarme a mis emociones. Si no quizá nunca evolucionen y se extingan. Y distraerse no es una solución. Si lo es enfrentarse a lo que uno siente.

El año pasado me quería sentir un poco como en Lost In Translation, soñando con Scarlett con una peluca rosa apoyada en mi hombro. Un amor platónico.

Pero más bien me sentí como en Olvídate de mi en la escena de la biblioteca

- Muchos hombres creen que soy un concepto, o que quizás les complemento, o que voy a darles vida. Sólo soy una mujer jodida que busca su propia paz de espíritu, no me asignes la tuya.

- Recuerdo muy bien ese discurso

- ¿Te tenía clichado eh?

- Tenías clichada a la raza humana

- Es posible

- Seguía creyendo que me salvarías la vida. Incluso después de eso

- Lo sé

- Sería diferente si pudiéramos volver a empezar

- Recuérdame. Inténtalo de verdad. Y quizá podamos.

Y yo trato de recordarla, pero ella parece que a mi no. 

Esto me recuerda que este año en la clase de cine un grupo me va a grabar como primera práctica con cámara la semana que viene una escena de "Olvídate de mi", ¡sin yo presionarles!, porque a una de ellas le encanta la película. Como me gustan los viernes. Es el día de dar cine y el día de no llevar mochila al trabajo.


.

jueves, 23 de septiembre de 2021

Se acabó el verano o eso dicen en el telediario

 Ayer terminó el verano. Esa estación que comenzó a finales de Junio, donde yo no paraba de pensar en que había perdido a una persona que consideraba importante, y que nublaba la vista de todo lo que había enfrente. 

Para mi sorpresa el verano fue otra cosa. Me atrevo a decir, y hacía tiempo que no pensaba esto, que ha sido de los mejores veranos de mi vida. Fue in crescendo. De menos a más. Y ahora que ha terminado, a veces pienso, que irá a menos. El otoño y el invierno a veces son así.

Me agarro a que de momento el verano parece que seguirá, al menos una semanas. De hecho, este sábado tengo otro concierto. Un concierto de la banda que en 2019 sacó el disco que posiblemente más escuche ese año y que más significó para mí. Este tipo de acontecimientos me recuerdan que ha vuelto la "normalidad", esa que nos llevan vendiendo tiempo y que parecía que no llegaría nunca. Es cierto que el verano ya lo ha demostrado. He podido viajar, ir a las fiestas de pueblos, ir a fiestas multitudinarias, volver a ir a conciertos y tantas otras cosas que hace justo un año parecían impensables. 

Siempre he sido más de calle que de casa. Y estos últimos tiempos me vi obligado a pasar en una casa más tiempo del que me gustaría. Eso me hizo pensar de más y vivir de menos. Ahora parece que todo eso ha cambiado y puedo volver a pasármela en terrazas de bar, callejeando Madrid, tirado en un parque...prácticamente cada día de mi vida. Y eso me llena tanto.

Dicen que la nostalgia es cuando recordamos momento del pasado en los que no sabíamos que estábamos siendo felices pero lo estábamos siendo. 

Yo soy muy nostálgico porque siempre pienso eso, que cada etapa pasada fue mejor y siempre pienso que no la disfruté como debería, lo que me hace caer en la culpa. Pero este verano me di cuenta en presente. Quizá por eso ha sido tan buen verano. Y quizá por eso algo ha cambiado en mí. Recuerdo tantas noches, tantos momentos, tantas personas...que todavía no me ha dado tiempo a generar esa nostalgia, porque el verano está tan cerca que casi lo puedo rozar con la punta de los dedos.

Este sábado se que en el concierto me la voy a gozar, y que luego será otra noche épica que años después me dará su buena dosis de correspondiente nostalgia. No porque crea que fue una de las mejores noches y no la disfruté lo suficiente, si no porque seguramente lo fue, como otras tantas que me quedan por vivir, pero esta vez seré consciente.

Agradezco tanto a este verano porque me ha servido de cura para todo aquel pozo negro que se había generado en mi interior en este último año. Puedo presumir de no haber tenido que hacerme ni una PCR, de no haber pasado el COVID, ni una cuarentena preventiva, ni nada por el estilo. Pero el virus me jodió la mente, como a tanta otras personas. Me jodió mi estilo de vida.

Algo que solo me ha podido devolver el tiempo, ese que siempre considero mi enemigo y que esta vez ha sido mi aliado. El Capitán Irlanda a veces necesita como aliado a un villano para ganar, como en los buenos cómics.

El Capitán Irlanda y el Dr. Tiempo contra COVID, el destruye almas.

Solo en los cines de tu puto barrio de mierda. Hippie, búscate un trabajo.


Qué pasaría si entraras
Y vieras que ya llevo tiempo
Sin estar

Te juro que yo pensaba
Que me vendrías a ver mucho más antes
De que esto acabara

Pido perdón por haberme ido sin avisar
Pido perdón por haberme ido
Por qué no me atrevo a dejarte
Si sigo sintiendo cada día
Nostalgia


martes, 21 de septiembre de 2021

El vuelo en caída libre que duró 90 días

 Junio

- ¿De verdad piensas que va a cambiar algo ahora?

- Si

- ¿Y por qué?

- Bueno, ella dijo que yo le importaba. Supongo que ahora todo será más fácil

- No le importabas. Te ha mentido, duele, pero es así. Te ha mentido mucho. Te lo lleva diciendo todo el mundo un huevo de tiempo.

- ¿Nunca te has parado a pensar que extraña es la expresión "un huevo de tiempo"? En plan, un huevo como lo conocemos, el alimento, es pequeño, o quizá se refiere a alguna mitología donde había un huevo que contenía el tiempo del universo.

- Si, justo por eso, venga, resuelto el misterio del huevo. ¿Por que coño sigues esperando?

- Pues porque no quiero perder a esa persona. Además, me dijo que todo esto iba más allá de nuestros roles no. Pues si de verdad no tenía que ver con eso, imagino que en algún momento me escribirá.

- O en dos semanas se habrá olvidado por completo de ti y por eso no te escribirá. Es lo más normal.

- ¿Y si se sigue acordando? Que todos sois unos catastrofistas. Además hice una promesa, le dije que cuando estuviese mal y necesitase ser intensa yo iba a estar siempre. 

- Si quisiese escribirte ya te habría escrito. Si de verdad le importas te habría dicho algo. Esté intensa o no lo esté.

- Quizá necesita algo de tiempo.

- Si, un huevo de esos del tiempo necesita.

Julio

- Ya te lo dijimos, nada iba a cambiar. Seguramente ni se acuerde de ti mientras tu saltas de vez en cuando con que la echas de menos.

- Ya, si que nada ha cambiado ya lo veo.

- Pues ya está. Has creído una cosa que no es, y no pasa nada. A todos nos pasa. 

- ¿Crees que no me echa de menos?

- No es que lo crea. Es que lo sé. Y tu también lo sabes, pero empezar a decírtelo duele. Aunque al menos ya lo ves como una posibilidad.

- Yo no quería casarme, ni formar una familia, ni nada por el estilo. Yo solo quería enseñarle mi mundo. Todo este tinglao que tenemos montado hoy aquí, por ejemplo, o todo lo que va a venir.

- Eso también lo sabe ella. Pero no quiere estar aquí. Y ya te digo, ella sabe perfectamente que tu no querías formas una familia. Simplemente todo esto se la suda. Solo que tu crees que debe vivirlo.

- ¿Y por qué me pasa eso?

- Supongo que has visto algo en ella que crees que nadie tiene. Pero que eso da igual, que aquí de lo que hablamos es que estas conociendo a otras personas y estas sudando de ellas por alguien a quien no le importas una mierda. ¿No lo ves?

Agosto

- No la cagues esta vez.

- ¿Por qué dices eso?

- ¿No recuerdas la otra vez que hablamos?

- Si

- Pues ya sabes a que me refiero. Te has pasado un comienzo de verano hecho una mierda y ahora estás bien, todos te vemos bien. Mira lo que ha provocado simplemente un mejor estado de ánimo. Todo lo que te ha pasado este verano. 

- Ya, pero no tiene que ver que yo este mejor con que esa persona no esté.

- No. No digo eso. Esta claro que esa persona te hizo estar a ratos bien, a otros ratos mal y todo esto de estar mejor tiene que ver contigo. Pero eso no implica que esa persona vaya a volver aunque tu estés bien, porque no quiere volver y si hubiera querido volver ha tenido tiempo suficiente.

- Un huevo de tiempo

- Jajaja, si, un huevo mágico del tiempo. Y no ha vuelto.

Septiembre

- Mira que te lo dije, te ha vuelto a pasar.

- Lo sé.

- Pero explícame, porque de verdad que llega un momento en el que me pierdo. Si sabes que esa persona pasa de ti, vamos, ni se acordará de tu existencia, ni te habla ni te quiere hablar, ni ha hecho el más mínimo amago de acercarse. ¿Por que andas diciendo a estas chicas que no puedes?

- Pues porque no puedo.

- Chico, que no eres viudo, ni tienes que guardar un duelo o algo del estilo.

- Que no va por ahí. Además, que mucho duelo tampoco he guardado.

- Ya, pero ¿entonces?

- Pues que no lo se.

- Eso es esperanza.

- Que no coño, esperanza es cuando crees que va a pasar algo que tiene pocas posibilidades de que ocurra y te agarras a ese pequeño porcentaje con cualquier detalle para creer que va a ocurrir. Aquí lleva sin haber detalles de esos como 90 días.

- Más razón.

- Aquí de lo que va es de ser honesto. Y ya te lo he dicho más veces, si me acuerdo de una persona cuando estoy con otra, me considero un puto mierda. No me gusta. Es como ser infiel sin serlo.

- Bueno, no creo que sea ser infiel tampoco.

- Sabes a que me refiero. A que no se, es injusto. Pues yo que se, o estoy con las dos personas o con ninguna. A mi eso de estar solo porque me gusta o por follar no me vale. Tiene que existir algo más. Y ese más no lo tiene todo el mundo. Lo tiene la persona que te lee en pocas líneas, que te hace sentir diferente. Que la miras por primera vez y sientes que la conoces. Y solo estoy esperando a que llegue alguien así otra vez.

- Vale, creo que entiendo parte de lo que dices. Otra parte me sigue pareciendo que espera un mensaje que no va a llegar.

- Bueno, pero antes de todo esto también esperaba un mensaje que no llegaba y mira, apareció otra persona que hizo que ya no quisiera el mensaje anterior. Y ya te digo, el mensaje se que no va a llegar, por eso no te preocupes.

- Pues queda con esta chica, hazme el favor. 

- Te prometo que lo voy a pensar.

- Como me digas que no me va a doler un huevo.

- Vale, una duda. ¿Aquí con doler un huevo a que nos referimos? Ósea, un huevo sigue siendo pequeño por lo que doler un huevo no es cantidad, ni es el huevo del tiempo, aquí imagino que nos referimos a los testículos

- Que versátil es la palabra huevo. ¿En verdad ya has pensado que vas a hacer no?

- Si

- ¿Y que vas a hacer?

- Si te lo digo pierde la gracia. 



jueves, 16 de septiembre de 2021

Siento que pertenezco a este momento

 Hace no tanto estábamos Marta, Judith y yo entre Callao y Gran Vía cuando nos fijamos en el portal de una bonita fachada de un edificio céntrico de Madrid. Ese portal estaba llena de modernos. Al pasar por delante de la puerta vimos que era un Centro de Estudios. Judith dijo "Anda que no estaría yo a gusto aquí. Con esta gente, que viste tan guay, son totalmente mi rollo". Yo pensaba "son un atajo niños pijos bohemios", aunque también, en el fondo, pensaba ese rollito malasañero no me desagradaba para nada.

Curioso el destino cuando este miércoles fue mi primer día dando clase ahí. Y no me había equivocado, ni Judith tampoco. Las instalaciones eran una locura, las aulas, los equipos, pero que más llamaba la atención efectivamente eran los alumnos. 

Conozco todavía poco a los míos, pero parecen creativos, con iniciativa, con un espíritu que otras veces he echado en falta en otros grupos. Estuvimos hablando de cine, series...y me di cuenta de que era gente que iba mucho mas allá de Marven y Fast and Furious o Harry Potter. Que tenían grandes inquietudes y le interesaban muchos diferentes temas.

Estuve realmente a gusto, en el aula. En cuanto salía las instalaciones, como el espectacular patio interior que tienen, me parecían tan increíbles que me hacían sentirme muy pequeño ahí dentro, pero ahí estoy. Intentaba meterme esa idea en la cabeza y hacerme fuerte, creérmelo.

Más ahora que mi futuro en CESUR está tan revuelto. Parece que Inspección Educativa analizará mi caso, y ya me han ido avisando de que me mentalice con el despido de aquí a nada. De ser así, imagino que viene un año complicado. Tendré que dejar el nuevo centro porque económicamente no me va a llegar solo con esas horas y replantearme que hacer. 

Tengo muchos malos presentimientos, pero siempre los tengo. 

Lo jodido de la situación es que los malos presentimientos, esta vez, los tiene demasiada gente.



Solo, creo que lo he perdido todo
La vida es suficientemente contundente
Como para andar llorando por ahí

Somos ingobernables por el oro
Nuestra esperanza es suficiente para verte
Cada noche, aunque ya te fuiste

Vuelo
Con mis cadenas sobre el cielo

Siento que pertenezco a este momento
El mundo es un lugar inhóspito y cruel
Y ya no espero casi nada del rival

Nunca
Nunca me voy a rendir, nunca
Por muy maldita que sea la maldición
Que nos echaron sin ninguna concesión

martes, 14 de septiembre de 2021

Hay en mí un lugar al que nunca voy por miedo a quedarme

Que gusto levantarme a las 12 de la mañana, Jesús, y así todo el añito. Y, además, al despertarme recibir varios mensajes de que maja es Ana Luz, a mi me lo van a contar, que llevamos una década de experiencias. No tengo ninguna duda de que hará un buen trabajo este año. Para eso me he encargado de que imparta la materia que daba yo el curso pasado. Ni se acuerdan de que ya todos la habían visto en esta foto haciendo de uno de mis personajes favoritos de la historia del cine.


Ay y esta foti nos la hicimos el verano pasado y me gusta mucho


Una de esas personas que me ha escrito esta mañana para hablarme sobre lo crack que es Ana Luz anoche mantuvo una conversación conmigo la ostia de interesante. Empezamos hablando de tonterias, como muchas veces, pero como las buenas conversaciones empiezan en un sitio y terminan en otro totalmente diferente y ni recuerdas como hiciste ese camino. 

Después de un rato hablando llegamos a un tema que me hizo reflexionar y darme cuenta de que a veces confundo la madurez con la inteligencia y creo que es un gran problema. Tiendo a pensar que las personas inteligentes son maduras, y no tiene nada que ver una cosa con la otra. 

El término madurez no me gusta especialmente, porque no me parece muy concreto y creo que existen diferentes tipos de madurez según a que nos atengamos, pero en líneas generales tendría algo que ver con como afrontar o gestionar determinadas situaciones basadas en la experiencia, más que en la inteligencia, y ahí está mi error. Puedes ser muy listo y no dejar de joderla y actuar y hacer las cosas mal, aunque creas que lo estas haciendo bien. O no ser tan inteligente, pero hacer las cosas de una manera racional y sana.

Por eso podemos diferenciar diferentes tipos de madurez según el contexto de cada situación. Pero en cuanto a madurez emocional significaría algo como enfrentarse al conflicto y tratar de resolverlos tratando de reducir al máximo la catástrofe para ti y para el resto de personas, por lo que soluciones como la huida, el rechazo, la rabia, el rencor no serían conceptos muy maduros. Más bien de gente inmadura que solo piensa en sí mismo y ni siquiera de una forma sana, porque ese tipo de actitudes a largo plazo las integras y te acabas convirtiendo en alguien que puede arrastrar graves problemas en las relaciones sociales.

Yo no creo haber tenido una gran madurez emocional muchas veces en los últimos años, pero gente que pensaba que si me ha demostrado que tampoco, y lo peor que ni son conscientes y creen que hacen las cosas bien (yo al menos siempre se cuando no he actuado de forma madura, porque madurez no es huir o renegar), y que para nada son el ejemplo a seguir. Simplemente era gente inteligente incapaz de resolver las situaciones y que toma los caminos fáciles y eso no es ser maduro. 

Es cierto que suelo coger los caminos más difíciles, y eso, tampoco es madurez. Ahí quiero llegar. Este verano, las primeras semanas tuve una gran inmadurez al anteponerme yo todo el rato y tratando de llenarme el ego. Solo quería estar bien y tranquilo, pero ese pensamiento me parece simple y no muy maduro, porque no me paraba a pensar mucho en las otras personas. Gracias a que esas personas quisieron quedarse conmigo, a mi lado y seguir viviendo experiencias empecé darme cuenta de que si seguía así me iba a perder un montón de cosas y seguramente a ellas también. Decidí quedarme y en estos meses he aprendido a valorarlas igual que ellas me han valorado a mi, lo suficiente como para no dejarme ir.

La edad es solo un número y aunque el tiempo es relativo (al final el sistema de medición de tiempo no dejar de ser un invento del ser humano), pero es lineal (hasta que la física cuántica demuestre lo contrario) y a mayor tiempo vivido mayor numero de experiencias, eso es innegable. Por eso he tardado en darme cuenta tanto de que debía cambiar ciertas gestiones o seguiría con unos comportamientos que no me podían llevar a buen lugar.

Y para terminar otra foti de hace muchos años que le hice a Ana Luz y me encanta


De donde nadie vuelve, yo te vi regresar.
Con un sol en los labios, que te puso el mezcal.
Te curé en esa casa, justo enfrente del mar.
Y con la voz cansada te oí murmurar.

Nada nos derribará...
Cuando llegue el temblor, cuando llegue el temblor.
Nadie nos separará...
Cuando llegue le temblor, cuando llegue el temblor.

Y desapareciste sin dar explicación.
Y yo me quedé gritando al cielo, cargarás con tu cruz.
Sentí escalofríos, sufrí la soledad.
Frecuente a la peor calaña de esta sociedad.

Te busqué en Buenos Aires, te encontré por París.
Dibujando rayuelas de fuego bajo un cielo gris.
Y nos desvanecimos compartiendo el vacío.
Y nadie vino a rescatarnos, y nos pudo el temblor.

lunes, 13 de septiembre de 2021

Volvieron Las Historias del Kronen

Pedí la habitación con vistas al mar
Perdí la visión cuando quise mirar
Perdí la pasión al volverla besar
Algo que puede pasar

Ya vendrán otros rostros
Consciente de ser el alimento pa’ mis monstruos
Ya llegará agosto, septiembre
Es el verano que nos falta, historias del Kronen

Con la ansiedad digna de esta altura
Lo dejamos y nos queremos con locura
Nada sino amor, mi vida
Porque, si no pica, no cura

Dejando decisiones a esos dados
Perdidos como barcos sin faro
Sin rumbo como barcas sin remo
Aun así llegamos los primeros

Han resubido este tema no sé cuantos miles de años después. Recuerdo cuando me lo ponía hace tiempo para quedarme en bucle en esa letra y estirar la pena. Siempre me llamó la atención el título del tema, pero nunca lo busqué. Hoy lo hice y resulta que es una película española de 1985 cuya sinopsis dice así:

"Sexo, drogas y peligrosos desafíos a la muerte en las calles de Madrid. "Kronen" es la cervecería donde se reúne un grupo de amigos con pocas expectativas vitales, jóvenes que aprovechan la noche para vivir sus aventuras de la forma más excitante posible. Cualquier placer, ya sea la velocidad, la música o las drogas les sirve para exprimir las noches de verano intentando pasárselo bien hasta el alba. El líder natural es Carlos, un joven tan seductor como amoral que de forma constante reta las convenciones hasta llevar a todos al límite."


No tiene malas criticas y tuvo su par de nominaciones a los Goya, incluso estuvo en el festival de Cannes. Mas allá de eso, al leerlo, he vuelto a pensar en lo que llevo escribiendo estos días aquí sobre el fin de este épico verano. Por desgracia, mañana martes me toca volver a ese maravilloso mundo laboral.

Por otro lado, he entendido mucho mejor la letra, obviamente. Antes siempre me identificaba con las frases de una historia de amor imposible, sim embargo, hoy me ha gustado especialmente la que dice "Perdí la pasión al volverla besar, Algo que puede pasar". Imagino que últimamente he besado a gente que no me apetecía en exceso. Otra que aparece en otro momento de la canción (y que dejare al final) es la de "Digo cosas bonitas pero hago cosas feas" también ha sido algo que he hecho mucho en los últimos tiempos. Es curioso como una misma canción según las épocas o etapas, aunque nos guste de la misma manera, nos fijamos en otros aspectos de la misma. 

La verdad que este verano, entre unas cosas y otras, no me han faltado Historias del Kronen.


Razones sobran para tirar la toalla
Pero no me sale de la polla
Estoy haciendo magia
Esperando tu mensaje en la botella a este lado de la playa

Tu vida y la mía, el mundo nos espera
Como una flor la primavera
Soy un hijoputa si no miras
Digo cosas bonitas pero hago cosas feas

De mi no se fían ni las hienas
Pierdo la cabeza con la luna
Mi pena ya es rutina
La disimulo, rara vez mengua
Yo, mi pena es una mina
Chica, no doy un palo al agua

Vivo obsesionado por descubrirme, por borrarte
Por volver a joderte
Estoy decepcionado ¿Qué voy a hacerle?
No fueron felices, prefirió la incertidumbre
Prefiero morirme a quedarme lejos de la cumbre
Bajar y tener que dar explicaciones
   

domingo, 12 de septiembre de 2021

El futuro está pidiéndonos algún sacrificio

Amanezco otro Domingo casi a las 6 de la tarde tras un finde muy malasañero. Necesitaba reconciliarme con muchos lugares que me quitaron en Marzo de 2020. Volver a los bares, a tantas plazas, el terraceo, el Latineo, los lateros, en definitiva, al jaleo bohemio y hispter del circuito moderno de Madrid. 

Me encuentro en mi mejor físicamente. No solo lo noto al mirarme al espejo. Lo demuestra también el el hecho de poder salir dos noches seguidas cada fin de semana. Debe ser ya mi quinta juventud. Estoy sin duda recuperando el tiempo perdido. Estos dos años que nos han quitado y que de alguna manera, tenían que volver.

Ha sido maravilloso y precioso volver a pasar horas filosofando en la noche sobre temas existencialistas, el sistema, las emociones, el pasado, la vida. Además, el sábado tuve la suerte de quedar con una amiga que se dedica a la escritura y hablamos sobre mucho como relatar una historia, los clichés, incluso se nos ocurrieron universos distócicos interesantes que deberían plasmarse en algún lugar. 

Durante esa conversación me acordé de lo cerca que está la Feria del Libro, donde en un par de semanas otra colega estará firmando su novela con la que lo ha petado y que va por su quinta o cuarta edición ya. La productora Little Spain (Si, la de Tangana) le ha comprado los derechos del libro con la intención de hacer sobre el una obra audiovisual.

Pero al acordarme de ella pensé más bien en todo lo que ha conseguido en apenas unos años por méritos propios. Ella era posiblemente uno de los espíritus más malasañeros que jamás he conocido. Resulta muy curioso observar y analizar como ha cambiado su vida en tan poco tiempo. Ha pasado de no perderse un ciego en el campus de la universidad, vivir en la plaza del 2 de Mayo para estar en el centro del jaleo cada finde, salir de after, drugs...a en pocos años trabajar primero para TELVA, después VICE, publicar su libro, convertirse en un personaje público (no hace mucho salió en La Moncloa hablando sobre la mierda de perspectiva que tienen las generaciones jóvenes en esta sociedad), acaba de empezar una columna semanal en El País y acaba de tener un hijo. 

La nostalgia de pensar en los ciegos que me he pillado en su cocina algunos viernes antes de irnos a la sala Maravillas o al Lucy porque era de las pocas personas que tenía piso compartido en pleno centro de Madrid. Hace una semanas me la crucé en Aranjuez, llevaba sin verla desde antes de que el COVID llegase a nuestras vidas, me dio un abrazo enorme con una sonrisa de oreja a oreja, y consejos sobre como pintarme mejor las uñas usando un liquido para que no se me apelmace el esmalte. Se la notaba tan feliz, y no es para menos, con todo lo que esta consiguiendo y le está pasando. 

Para mi es un reflejo del camino correcto. De no dejar de ser tú, pero avanzar, crecer, mejorar, evolucionar, ir cumpliendo objetivos y sueños hasta tener una vida completa. Con esto no quiero decir que yo busque lo mismo que tiene ella en su vida ni mucho menos (el hijo ni se me pasa por la cabeza), pero si es un ejemplo de que en todos estos año la he visto complementar el construirse un camino y a si misma con el pasárselo bien, aprender, trabajar, ser útil para la gente que le rodea y sentirse bien.

Espero que me ponga una bonita dedicatoria en el libro.


Cuando muero cada noche
No se suelen ver cometas
Hoy no es una excepción
Ojalá que no amanezca

El metro está vacío
A las seis de la mañana
Y las caras de la gente
Son más grises y más raras

Ya va siendo hora de volver a casa

La ciudad no es atractiva
Cuando termina la noche
Y las calles aun oscuras
Donde solo se oye el frío

Viernes madrugada
Tan solo quedan los restos
Y las malas sensaciones
Después del nocturno fuego

La noche ha estado bien
Hasta que ella ha aparecido
Te juro ha estado bien
Pero creo he recaído

Y cuando llega el fin
Todo es puro pesimismo
Que si el tiempo perdido
Que si el odiarse a uno mismo

Bajando corredera
Cuando me cruzo a Dionisio
Me dice de ir a un after
Creo que está poseído

Tus puñales aun me duelen en la espalda

jueves, 9 de septiembre de 2021

Si caímos en picado es porque a veces fuimos nubes con la mente

 Paso a resumir una bonita conversación de anoche, omitiendo los: xD, emoticonos, jajaja, y otros detalles y tratando de dar algo de forma al texto porque igual si me lio a poner x? kva y demás pierden algo de valor las palabras que dicen así:

- Pero, a ver, Dani, ¿por que crees entonces que esas personas quisieron este verano estar contigo?

- Pues no se, porque habré adelgazado, por estar moreno, que contrasta mucho con el color claro de las uñas...mmm, la ropa de verano, que me sienta mejor. La verdad que visto mucho mejor en verano que en invierno, eso es así.

- Ósea, ¿de verdad me estas diciendo que por pintarte las uñas alguien va a querer estar contigo? No se, pero a Celia la conociste el viernes en un macrobotellón en las fiestas de Aranjuez y se quiso venir a la fiesta con todos nosotros el sábado. Yo no la vi precisamente fijándose en tu color de uñas.

- Bueno, pues me lo mencionó

- Vale, pero vamos a dejar de decir tonterias. Yo la vi reírse, querer hablar contigo. Ósea si os fuisteis a hablar por ahí como dos horas y era ya de día.

- Ya, bueno.

- ¿Y en el Orgullo? ¿Y en Ávila? ¿Y en Barcelona? Ósea Dani estamos tontos o que. No me jodas con que es la ropa o cualquier otra mierda.

- ¿Y si tengo miedo?

- ¿De qué?

- Joder, mira este verano. Tamara, Pablo, Vanessa... lo han dejado con sus parejas y Celia está punto.

- Vale, ¿Cuántos han terminado a malas?

- Ninguno

- Terminar una relación es una decisión. Terminar una relación a malas es otra decisión. Joder, Tamara llevaba casi 7 años y Vanessa 5. Claro que debe costar dar el paso, pero si lo dan razones tendrán y no tienen que ser estar mal con esa persona.

- Si tengo asumido que las cosas se terminan.

- La cuestión es esa, cuando algo termina puedes dejarlo y dejarlo bien como han hecho. De esa manera no pierde valor lo vivido. Si terminas mal de alguna manera si lo pierde.

- Ya. En verdad flipo con lo valiente que ha sido la gente este verano.

- Bueno, a veces te das cuenta de que aunque las cosas vayan bien no te sientes al 100%  y sí, en verdad han sido supervalientes. Pero vamos, que te vas del tema. ¿Te la vas a llevar al concierto ese o no?

- No.

- ¿Por? Y como me digas que para esa fecha es que ya es invierno y tu ropa no mola tanto o que habrás perdido el moreno te doy una colleja.

- No es eso. Es que no quiero ir con esa persona.

- Vale, pues si quieres ir solo ve solo.

- Tampoco se si quiero ir solo. Ese es el tema. Por eso he dicho esa persona.

- Creo que es normal tener miedo y que pensar a largo plazo agobie, pero acabamos de hablar de estirar una relación por estirarla. Eso tampoco tiene sentido.

- Pues por eso te decía lo de Tamara y estos.

- ¿Pero tu les ves mal?

- Que va. Tampoco les veía mal antes. Ahora les noto no sé, más libres, más como quieren ser y vivir. Como si en verdad te quitas algo que ni sabes que llevas puesto aunque sea una mochila vacía. En plan: No molesta, pero sin ello de repente dices ostia, que libertad.

- ¿ Y no te parece maravilloso?

- Sí, y por eso el miedo.

- Lo que te pasa es que has tenido un verano de ¡viva la Pepa! y al verano le quedan dos días. La vuelta a la realidad está a la vuelta de la esquina. 

- Lo sé.

- Entonces, ¿con quien vas a ir al concierto?

Y ahí volví a esquivar la preguntar y a salir con otros temas mas mundanos. Esa conversación me hizo pensar mucho en todo lo que he visto cambiar este verano en la vida de muchas personas y es verdad que no vi a nadie peor. Obvio que las primeras semanas echaban de menos su relación y no iban dando saltos de alegría por las calles, pero había una calma en ellos mismos que creo que ni eran conscientes de que la necesitaban hasta que la tuvieron. Y necesitaron ese tiempo de adaptación para empezar su nuevo camino.

Este verano he huido de cosas porque quería exprimirlo al máximo. Me ha salido sorprendentemente bien. Y quizá, como digo, en esa conversación había algo implícito en toda esa huida. Ninguna de las personas de este verano era la persona. De eso no tengo la menor duda. 

Sé a quien echo de menos y de quien me acuerdo. Y no, no hablo de la Niña Imantada aunque me acuerde de ella a veces, como es natural y como Tamara o Vanessa se acordarán de sus personas. A ella siempre la recuerdo como se recuerda una película que te gustó mucho, pero que sabes que es una historia de ficción y que no es real. Aunque en su tiempo lo fue. Está tan alejada en el tiempo que es una ensoñación. 

Se de quien me acuerdo, de que risa, de que ojos...como dije en el post anterior puede que me equivocase de persona. Porque a veces construyes una imagen poco verosímil respecto a la realidad, pero tampoco tuve el tiempo ni el contexto para comprobarlo. 

Este verano he visto muchas cosas llegar a su fin. Este verano toca a su fin. 

Solo así comenzará algo nuevo.


No, no evitarás
Que quiera largarme cuanto antes
Si cada vez que me quiero ocultar
Tú me conviertes en gigante

Me has llevado por corrientes de agua que van
A tus redes
Y tus ojos son dos prismas devolviendo oscuridad
No pretendas defenderte

Te diré que no
No me convences
Me quiero evaporar
Entre la gente

No lo vas a negar
Algunas bases no resisten
Y un pulgar puede asfixiar
Y a quien madruga... Dios no existe

Ya puedes preguntar
Preguntar por ahí
O a los tuyos
Si una gota colma el vaso
Otras veces, ya es el mar
Y es el mar esta vez, ¿lo entiendes?

Un día me iré, me iré de verdad
No sé si me ves del todo capaz
De cambiar, nombre y edad, y si me encuentras decirte
"¿De quién me estás hablando?"

No, no lo haré jamás
Me falta valor, o fuerza vital
¿De qué me sirve salir de esta inmensa ciudad
Si de quien pretendo huir, seguirá dentro de mí, y eres tú?
Y eres tú

Si puedo escapar
Es con la mente

miércoles, 8 de septiembre de 2021

Tanto hablar del fin, que ahora apenas duele

Quizá lo mejor de este año vaya a ser que no tengo que madrugar. Sin duda, va a ser un año raro. Pero dormirme a la hora que me de la gana y levantarme cuando me plazca va a estar flama. Así no tengo que cambiar la rutina del verano. A ver si de esta manera el verano dura para siempre.

Todo porque una persona que me importaba tremendamente me estaba utilizando. Me resulta extraño pensar como me deje caer por aquel entonces, a pesar de que todo el mundo me avisaba continuamente de las Red Flags. Supongo que era demasiado obvio, pero quizá la mezcla de antidepresivos, MDMA, speed, lozarepam y alcohol no ayudaban especialmente a ver las cosas con claridad. La verdad que si, que así era complicado entender que me estaba pasando. Me guiaba con el corazón, pero el corazón estaba fatal de la puta cabeza.

A mi aquella Chica Tricolor me cambió la vida, pero yo solo fui un medio para sus fines. "Si de verdad le hubieses importado, ya hubiese demostrado algo en todo este tiempo. Ya habría dado un paso al frente en toda esta situación. Esta claro que pasa de ti y que le das igual". Hace unas semanas me dijeron eso cuando pensé si era normal terminar así. Ojalá conocerla ahora sin ese contexto tan terrible. Estando bien. 

Quizá no todo es tener principios, quizá también hay que tener finales. Solo así pueden existir otros principios. Antes odiaba los finales. Los veía un sufrimiento. Pero sufrir es parte de la vida. Y sufrir no es malo. Es perder algo que te importa. Lo malo es mantener algo por miedo a sufrir cerrándote a aquello que puede venir.

Por eso me resulta curioso que a las personas que han aparecido estos meses les he ocultado su existencia. Supongo que me avergüenzo de haber sido tan patético habiendo querido cuidar a alguien que jamás me quiso cuidar ni un segundo. Ya me lo dijo el más sabio "Al final Dani, van a aparecer. Va a haber personas a las que importes, que quieran tenerte cerca, que no te vayan a tratar así. Si alguien te quiere no se va". Llegaron y es doloroso pensar como gente este verano, en mucho menos tiempo, me han demostrado muchísimo más y me han dado un valor que necesitaba sentir. Imagino que fue otra de las razones por las que deje de mezclar tanta mierda (bueno, el alcohol no se ha ido, la verdad). 

Anoche Cristina me escribió de repente, sin venir a cuento, para decirme que estaba muy orgullosa de mi y lo bien que me ha estado viendo este verano cuando he bajado a Aranjuez. La verdad que se me hace raro recordarme en esos meses nublados donde no fui yo mismo. Ha cambiado todo tanto, he cambiado tanto. No paro de ver como este verano nos ha cambiado a todos tanto. 

Reconozco que pensé que quizá no me encontraría y seguiría triste muchos años, pero ha pasado algo mejor. Tengo más seguridad que hace un año porque he sido capaz de sincerarme conmigo. Escucharme. Avanzar. Dejar de vivir una mentira basada en mis miedos. 

En un viaje a un mundo
Por países de los que no sé volver
Lo encontré oculto sin querer

Me contó secretos sobre cosas
Que no podrías creer
Me condujo hasta las puertas del saber

Me contó la forma de abrazarte
Y que no me queme la piel
Y me explicó el secreto
Para dormir cuando no estés

Y ahora si no tengo miedo
Creo que es porque lo he entendido bien
Ya sé lo que tengo que hacer

Tengo que alejarme de los monstruos
Que no me han dejado ver
Y tengo que romperme
En mil pedazos otra vez
Otra vez
Otra vez
Para dormir cuando no estés

lunes, 6 de septiembre de 2021

Ella era un temazo, a mi me sonaba siempre bien

Nos han regalado tarta y cerveza por cantar. Alucino pepinillos.

Ahí estábamos, como de costumbre, con nuestro cancionero impreso en papel, en Las Calabazas, tiraos en el césped. Bebíamos nuestras birrinchis, agustito. 

Sacamos la guitarra y empezamos a cantar. Al rato se nos acercó una mujer que estaba celebrando el cumpleaños de su hija, y nos dijo que le estaba gustando mucho como cantábamos. Traía un plato de tarta. 3 o 4 canciones después, por el otro flanco, dos cuarentones que estaban haciendo un picnic con sus mujeres y sus hijos nos dijeron que si conocíamos alguna canción de Viva Suecia, "ya ves que si", contestamos algo flipaos por la situación y porque conocieran dicha banda. Total, que al terminar la canción nos trajeron dos cervezas artesanales que estaban que te caes al suelo.

Es maravillosa la música. A pesar de ser una persona enamorada de las imágenes no concibo un día sin escuchar canciones, y cada vez menos, sin cantar.


Varias cervezas después, ya en otro lugar, aunque no lejos de allí Celia me decía que le gustaban mis manos y el color de uñas que llevo ahora, turquesa y verde intercalándose, y para mi que no están muy bien pintadas. A Celia la conocí hace unos días y me tiene como consejero de una relación que va a la deriva. El sábado dormí con ella aunque ninguno queremos nada con el otro. Ella está pillada por otra persona y a mi, supongo que ahora mismo, lo que más pereza me da del mundo es estar con alguien. Cada día es una aventura, a veces con tarta y cerveza de regalo, y quiero que siga así.

Yo se lo he dicho claramente, "si estas dudando entre dos personas significa que no puedes estar con ninguna, así no haces un favor a tu novio, aunque sepa que te has liado con otras personas y te haya dicho que no pasa nada y que tengáis una relación abierta". Esta feo. Yo de verdad que en estas cosas me pierdo. Coño, para eso que haga lo que hago yo ahora, de verdad, no me parece tan complicado. Al final su razón es el proyecto musical que tienen juntos. Imagino que es como cuando te casas o tienes hijos. Te atan cosas y ya el tema se complica. Pero joder, un proyecto musical por muy guay que sea...yo que se...no puede condicionarte tanto. A mi ya como colega se me acaban los argumentos y aunque dice que tiene la decisión de dejarlo casi tomada, algo me dice que va a tardar más de lo que debería, pero seguirá con el chaval nuevo porque le gusta. Vamos, alargar en vida una muerte anunciada. Total, que cada vez me dan mas pereza las relaciones por este tipo de cosas. A favor de los rollos, de verano o de la estación que sea. Es mi conclusión después de este veranito tan movidito.

Por otro lado, quizá si exista alguien por quien merezca la pena tener un mínimo de estabilidad y durabilidad en el tiempo. Alguien a quien poder decirle cosas como estas

- ¿Qué harías en Londres tu con una persona como yo?

- Quererte. Ser feliz. Enfadarme contigo. Cocinar para ti. Comer lo que cocines. Escucharte refunfuñar. Contarte como empecé toda esta aventura. Salir al cine. Refunfuñar yo también. Escuchar como me cuentas tu vida. Quedarnos en casa. Escribir y leértelo. Reír contigo. Odiarte. Preguntarme como es posible que te quiera tanto. Oír música. Pedirte perdón. Viajar. Cuidarte cuando estés enferma. Leer. Dejarme cuidar por ti cuando este enfermo. Verte envejecer. Hacerme viejo. Decirte las cosas que llevo años pensando. Vivir. Quererte. Vente conmigo.

domingo, 5 de septiembre de 2021

Estuvimos allí solo un instante más y llegamos hasta aquí

Despierto un domingo casi a las ocho de la tarde, y no es para menos. Dos fiestas seguidas que terminaron ya con la mañana bien entrada ambas. Tengo las rodillas echas un cristo de tanto bailar y un afonía interesante.

Ha sido un verano del que no quiero despertar. Me atrevo a decir que ha sido de los mejores de mi vida. Han pasado tantas cosas que me asusta pensar que cada año, mirando a futuro, siempre será peor que el anterior. Y que quizá he tocado ya la cima. Se que se caerá gente por el camino, perderé más energía, no podré aguantar este trote, ni la gente querrá vivirlo y quizá yo tampoco.

Me resulta increíble pensar que en apenas una semana, 10 años después, Guille vuelve al campus donde nos conocimos para estudiar otras dos carreras. Ya estamos fantaseando y gozando como va a ser volver a irnos de fiesta con toda esa gente universitaria. 

Volver a la uni. Ayer se lo decía. Que bonito. No fue la mejor etapa de mi vida porque lo que vino después ha sido bestial a nivel de crecimiento personal, profesional y lleno experiencias vitales. Pero si fueron los años más salvajes. Por beber, llegue a beber hasta en clase. Follar en la filmoteca o en un rincón del campus durante una fiesta de la Primavera. Disfrazarnos de los Reyes Magos e ir entrando por las clases de la universidad para cantar un villancico (aun no se como éramos capaces de hacer esas mierdas), y así podría estar horas, recordando lindezas. Creo que siempre tuvimos claro que había que explotarlo al 100%, que los años universitarios no duraría siempre, y que ya aprenderíamos después. Y así lo hicimos. Creo que no nos salió mal la jugada.

Volvería a vivir una y mil veces aquella etapa. Para luego llegar aquí. Al hoy. Donde, sí, puedo tener quizá más inseguridades, más exigencia, menos amor propio, pero creo que quitando los tiempos de pandemia, todo lo que he hecho ha sido no parar. Por eso imagino que lo pasé tan mal cuando nos obligó el mundo a parar. Este verano parecía que el COVID no existía. El macrobotellon de este viernes en las fiestas de Aranjuez lo demostró. Creo que no vi ninguna mascarilla. Parecía que el mundo volvía a girar. Quizá eso es todo lo que necesitaba. 

Espero grandes cosas de este año viendo el panorama que se ha abierto frente a mi en estos últimos meses. Y me asusta pensar que en algún momento, por cojones, todo esto tiene que empezar a bajar. Trato de no pensarlo y disfrutarlo. Aunque a veces no pueda.


Me creo que voy a salir
Y olvidarte pa' siempre
Pa' que me diga la gente
Que estoy mejor cuando estoy sin ti

Me he mudado lejos pa' no verte más
Y he levantado un muro por seguridad
He puesto un par de drones para vigilar
Y francotiradores si hay que disparar

Me gustaría dejar mi vida y estudiar medicina
Ocho años de carrera, máster en cirugía
Con cuchillo' de cocina mi cabeza abriría
Pa' olvidarme para siempre de que tú me querías

No tengo miedo del dolor, me he hecho su amigo de a poco
Me calman las drogas, me gustan los locos
No tengo miedo a la sangre, la que tengo está fría
Pero no puedo aguantar pensar cómo sería

jueves, 2 de septiembre de 2021

Aquellos años frágiles [No recuerdo una antihistoria mejor]

Otro fragmento de la historia de lo que fueron los mejores años de mi vida fueron los que pasé en el cine su lado. Hoy ha sido inevitable recordarlos.

Lo mucho que íbamos al cine. Una o dos veces por semana. A veces incluso fuimos para no ver la película. ¿Qué por que me he acordado de esto ahora? Hace un rato me encontraba creando temario cuando apareció el concepto de los preestrenos cinematográficos para comprobar la reacción del público frente a una nueva película y mi cabeza, solita como de costumbre, viajó tiempo atrás sin preguntarme si quería.

Muchas veces íbamos gratis. Ya fuera porque ella siempre tenía puntos en la tarjeta de Cinesa o porque siempre conseguía entradas para preestrenos. Incluso para alguna película ganó 2 preestrenos y nos llevábamos a "los niños", Guille y Marco. Le encantaba participar en sorteos y concursos para preestrenos y casi siempre los ganaba. Recuerdo tantas películas vistas de esta forma...algunas que me dejaron una huella increíble como "La vida secreta de Walter Mitty" o "Nebraska". Y como ella hizo el esfuerzo de ver la trilogía de "El Hobbit" odiando ese estilo de pelis, pero era capaz de ganar esos sorteos motivada por la ilusión que me haría a mi verlas gratis y antes que nadie.

Cuando íbamos al cine solía elegir ella. Tenía mucho mejor gusto que yo. Como aquel años donde yo los lunes no tenía clase por tener una asignatura convalidada. Siempre cuando ella salía de la universidad íbamos al cine de Méndez Álvaro, Manoteras o Príncipe Pio.  Nos encantaba luego salir y comentar la película durante horas emocionados. Su puta inteligencia siempre me deslumbraba.

Estábamos desayunando en Salzburgo cuando la escribieron un e-mail donde la ofrecían realizar sus prácticas universitarias en una agenda cultural. Yo le dije, "tienes mucho más talento que eso, no vayas ahí". Ella se enfadó porque pensaba que yo quería frenarla. Al final no recuerdo por qué, pero no las cogió. Se que no fue por mi, porque se enfadó muchísimo, pero no las cogió. 

El tiempo me dio la razón meses después y ella me lo confesó. La primera vez que quedamos sin ya estar juntos me dijo "Me han cogido en Sensacine y me van a pagar las prácticas". De ahí a todo lo que ha conseguido hasta el día de hoy como redactora de lo que más le gusta en "ocio y cultura", escribiendo de cine y música. Ámbitos donde siempre tuvo mejor gusto que yo. Y donde he aprendido tanto de ella que sonrío al recordarlo. Aquel día había mucha felicidad en sus palabras. "Te lo dije, tu vales mucho y vas a llegar a donde tu quieras".

No me suelo equivocar cuando veo personas con potencial. Con ella hice un montón de proyectos, no porque estuviera conmigo, he estado con más gente. Funciona más bien al revés quise estar con ella porque quería hacer todos esos proyectos con ella. Otros proyectos posteriores, ya sin ella, fueron sobre ella. Me ayudó caracterizando en cortometrajes, siendo mi consejera, mi fotógrafa en videoclips, mi mano derecha. Era mucho más inteligente y culta que yo. Y mi inseguridad era abismal aunque no lo pareciese. Siempre decía "Dani que pinto yo ahí" y al final siempre era un "He aprendido un montón, me lo he pasado genial, gracias por traerme" y yo le devolvía el agradecimiento. 

Ayer entré en su Instagram, ya que en la cuenta nueva no me tiene bloqueado, y eché de menos todo lo vivido.

En todo este tiempo solo he conocido a una persona que me haga sentir así, pero que no me permitió mostrarle todo lo que en estos años aprendí como si hizo ella. 

Perdí todas nuestras fotos cuando se me jodió el ordenador hace años. Solo mantengo esta del antiguo teléfono. Y sinceramente, con esta foto me vale para toda una vida.



Se han muerto las flores que había en el florero
Hace mucho que nadie me dice te quiero
Y yo que lo entiendo me parece normal
Nadie en su sano juicio me podría aguantar

No te llamo, ni te escribo
Pero estoy pensando en ti
Ojalá estuvieras ahora mismo aquí
Tengo ganas de decirte
Lo importante que eres para mí
Pero en vez de eso
Estoy chuleando por Madrid

Desde que te fuiste ya no sé qué hacer
Y me da mucha pena no volverte a ver
Puede que algún día podamos hablar
Pero mis putas manias no las puedo evitar

Te quiero follar, te quiero matar
No sé lo que quiero pero quiero más
Te quiero follar y después estrangular
No sé lo que quiero pero lo quiero ya


martes, 31 de agosto de 2021

Creo que me voy a echar a perder pensando en ti otra vez

"No tengo valor para seguir contigo este viaje" dije entre dientes. Error tras error. Y ahora miro hacia atrás y solo estás tu, aunque sea consciente de que el tiempo pasó. Esperaba que fueras a echarme de menos. Y después construí aquel refugio de hielo perdiéndome en un línea recta y recordando como olvidar. 

Partimos a cualquier otra parte, viajando en carretera con el sol cayendo detrás de nosotros. Tu me acariciabas la nuca y cantabas las canciones que hablaban de nosotros. De como saltamos y caímos justo aquí. Y yo no estaba seguro de si todo era real o de si estaba forzando todo al máximo. Creo que en el fondo si lo sabía. Sólo el hecho de hacerme la pregunta indica autoconvencimiento y duda.  Esto no quiere decir que no me gustase lo que pasaba, simplemente que creo que si uno duda es mejor frenar. Quizá había una compañía mejor. Y era injusto pensar en otra persona cuando estabas a mi lado.

Y en aquella rotonda un recuerdo se apoderó de mi. El recuerdo de haberlo hecho mal y no saber parar, de la ansiedad y de andar dando vueltas a un presente y un futuro inexistente. Revolcándome en la mierda cual gorrino en la granja. 

Aceleraba echando de menos hasta su forma de caminar, su mal humor, su estar mejor, su risa...yo no tuve miedo de habernos encontrado y haber coincido en el espacio-tiempo. 

Caída la noche paramos en aquel mirador. Sonaba música bajo nuestra conversación y yo solo rezaba para que no se agotara la batería del coche.


Yo era el canalla de la silla 
del fondo de aquella barra
Del bar de aquel barrio
colgado de aquella jarra
De birra, yo era aquella cabra 
que tira al monte
uno que huye 
pero no se esconde

Mi madre me enseñó a no correr 
cuando todo arde
Y que un valiente dura
lo que le deja un cobarde
A no tapar con dinero 
agujeros del alma
A no ir más rápido 
que tu ángel de la guarda

Yo cogí mis alas rotas, 
las guardé como un tesoro
El tiempo lo cura 
y a la vez lo mata todo
Así los años me enseñaron 
la lección más importante
Que todo es pasajero,
que nada es para siempre

Que el tiempo es una cuenta atrás,
 yo dije vaya
Tierra trágame 
y escúpeme en la playa
Hay cicatrices 
en lecciones que aprendí
Cuida a las personas importantes 
empezando por ti

Estoy cazando sus dragones, 
bailando con mis demonios
Pero sueño con cambiar el mundo
armado con un folio
Libre como un lobo
y tan lejos de sus disfraces
Hoy soy el resultado 
de mis años salvajes

Y ahora tu has llegado a mi vida
Para ponerla patas arriba

domingo, 29 de agosto de 2021

Comoquieroquemequiera

Que agujetas de bailar todo el fin de semana y que me duela la mandíbula de reírme, y quizá, tengo esta pesada tos de demasiado fumar estas noches. Que joputa, cada hora se me acercaba Leiva y me decía: "venga que te he liado un cigarrito". Y a la terraza. A veces no soy consciente de la suerte que tengo de tener a esta gente y de lo que hemos creado. Aun recuerdo cuando el era menor y le colaba en discotecas de Madrid y ahora se va a vivir con su pareja. Se me hacen los niños mayores. Aunque como le dije, "yo sigo siendo tu padrino", "que tu chica necesita trabajo, el tito Dani se lo consigue" y así ha sido. Parezco El Padrino.

Más magia de este finde ha sido volver al local. Tener un local a las afueras de Aranjuez donde poder hacer todo el ruido que queremos, con equipos de música, neveras...un lujo para los veranos. Este año había ido poco al local, a diferencia del verano pasado. Hace un año cada fin de semana ahí nos plantábamos afincados noche tras noche hasta que el cuerpo aguantase.  Ha sido bonito volver a cruzarme con personas que llevaba meses sin ver porque habían estado en los Juegos Olímpicos, viven en Bolonia o se la pasan en la carretera tocando con la banda mucho tiempo al año.

Ha sido raro, quizá porque nunca he bailado tanto, porque tenía demasiadas ganas de pasarlo bien, de ir despidiendo el verano de nuestras vidas, donde quien quiso estar estuvo y quien no quiso se lo perdió.


He echado de menos a personas, como siempre, pero pensando más en la lástima que me daba que se perdieran todo lo que estaba pasando, a diferencia de como otras veces, que todo escondía una razón más egoísta. Quería que estuvieran ahí para que yo me sintiera mejor. Creo que ha sido un verano de mucho cambios en el círculo, en mi mismo, mi contexto y mi mente. No se si todo lo nuevo que  ahora viene va a ser mejor o peor. Solo espero seguir disfrutando tanto de todo lo que me está pasando.

Vivo por la noche
Esperando a que te acuerdes de mí
Paso por la esquina donde aparcabas el coche
Y nos quedábamos hablando hasta las mil

Yo te veo en mi sueño
Que me lleva y que me atrapa
Hay a veces que aún recuerdo
Cuando me cantabas a las tantas

Me da miedo cuando duermo
Y te veo, tú tan guapa
Prefiero tener insomnio
Así tu presencia no me mata

Cómo quieres que te quiera
Si el que quiero que me quiera
No me quiere como quiero que me quiera
No sé si tal vez volveré a perder

Cómo quieres que te quiera
Si el que quiero que me quiera
No me quiere como quiero que me quiera
Que me quiera bien

jueves, 26 de agosto de 2021

Me di cuenta que no te quise, no te quise perder

5 meses pasando por la puerta de una habitación sin alma.

Un colchón de 1,35 que llego a principios de Abril y que ahí sigue, cogiendo polvo. Su único uso es irse a la habitación pequeña cada pocos días para montar una fiesta.

Tiene algo esa habitación que me genera rechazo, me produce pesadillas, parálisis del sueño, terrores nocturnos. No se si es el espejo del armario o el que sea una cama demasiado grande, será pura sugestión, pero lo que tengo claro es que no me gusta dormir ahí. Ni solo ni con nadie. 

Apenas entro a esa habitación, solo para cambiarme de ropa o asomarme a los atardeceres con un tercio en la mano.


Lo que más me gusta de esta casa es tener la posibilidad de cada pocos días salir de esta casa.

Mañana parto a Aranjuez con el maletero lleno de botellas a una gran fiesta de cierre de ciclo de la que es mi segunda casa. Un piso en el que duermo mejor que en el mío propio.

Cambian sus inquilinos, debido a que cambian los ciclos de vida. Pero el se queda a vivir ahí, la persona que cumple la semana que viene 10 años de mi vida, que se dice pronto. Como mi mejor amigo, reto nada fácil. Pensar en lo vivido en esta década es una locura. El otro día nos pasamos casi 4 horas al teléfono recordando lo vivido. Especialmente la etapa de la universidad. Lo que me recuerda que casualmente mañana hará un año de la última vez que la vi, y como ha cambiado todo. 

Muchas emociones en poco tiempo. Mañana toca ver como dos amigos se marchan a otra casa para iniciar su propio camino en pareja mientras otros que llegan a esas 4 paredes para formar parte de esta historia... que poco emocionante sería la vida sin estos cambios.

Odio la estaticidad.

Tenga la maleta siempre preparada
Mis propias palabras no me dejan dormir
Pierdo la mirada en frente de la almohada
Sufro pesadillas como en repeat
Vivo rodeado pero solo
El aire del otoño cuando quiero abril
¿Cuántas veces pensé en abandonarlo todo?
Volver a donde fui feliz

Borramos nuestro número de favoritos
No se explica con resúmenes
¿Cuánto de grande es el amor que compartimos?
Si la luz define los volúmenes
Te brilla la cara, el cielo está bonito
Que no se apague, súbele
Al menos mientras dure que sea infinito
Cuidarlo hasta que cure bien
Dejé el equipaje que me sobraba
Esa parte de mí que más odio
Al tiempo aprendí de lo que dolió
Vivir es salir de la nada
Qué bueno que fue perderme contigo
Hacer la vida improvisada
No es verdad todo lo que percibo
En esta ciudad desgastado

¿Cómo va a ser?
¿Cómo te fue?
¿Tú cómo estás?
Ven y siéntate sobre mi ser
Me doy cuenta que no te quise
No te quise perder

Después de tanto
¿Cómo te fue? ¿Tú cómo estás?
Yo más o menos bien
Ven y siéntate sobre mi ser
Sé lo que se siente
Me doy cuenta que no te quise
No te quise perder